Pasamos nuestra primera noche en el hotel Melia Bali que iba a ser nuestro centro de operaciones durantes los primeros días en Bali. A las 8 de la mañana nos estaba esperando Mario Widi (un guía de habla castellana con el que habíamos contactado por Internet) para hacer la primera excursión a la isla. El guía se llama Mario porque los nombres balineses son muy largos y demasiado complicados para nosotros y se ponen nombres Españoles para que sea más fácil identifica
rlos. El nombre de Mario Moreno se lo puso un mejicano y razón no le faltaba porque es igual que cantinflas… El primer día apareció con un pareo y un pañuelo en la cabeza, tipical balinés y de su mano aprendimos la forma de vida de su gente, la felicidad que transmiten independientemente de las condiciones en las que viven, su conformismo extremo y sobre todo la sinceridad de sus sonrisas y lo serviciales y acogedores que son. La calidez de su gente es un reclamo en sí mismo para el turismo. Comenzamos asistiendo a la danza balinesa que se llama "Barong en el pueblo de Batubulan”. Las danzas resumen leyendas y acontecimiento épicos y religiosos, con el constante y monótono sonido del gamelán, el conjunto musical. Un lugar muy turístico y una visita, para nuestro gusto, totalmente prescindible. Continuamos la ruta por la zona de Bangli dónde visitamos el templo Kehen Bangli. De camino es curioso ver a la gente llevar ofrendas y encender incienso en los pequeños templos al borde las carreteras, frente a sus negocios y en sus casas (todas las casas tienen un pequeño templo en el jardín, más o menos grande según la situación económica de la familia). La mayoría de la población es hindú y ¡muy religiosos!. También es interesante observar cómo las mujeres se dedican a trabajar en el cultivo de arroz (que es la principal fuente económica de Bali junto con el turismo), mientras que los hombres están sentados viendo pasar las horas. El guía nos llevó al templo Kehen Bangli porque el templo estaba de fiesta y allí pudimos contemplar de primera mano la cultura balinesa y disfrutar de la fiesta en el templo, que estaba engalanado para la ocasión. Para entrar los templos es neces
ario llevar el pareo. A la entrada hay carteles que te indican las formas "decorosas" de vestir en los templos, además los carteles también prohíben el paso a las mujeres mientras están menstruando porque están "impuras". Me pasé todo el viaje preguntándome, y ellos, ¿cómo lo saben?. Fuera del templo, asistimos a una pelea de gallos, deporte nacional de los hombres de Bali. ¡Creo que era la única mujer del recinto!, después paramos en medio de la carretera y nos bajamos para dar un paseo por un bosque de bamboo hasta llegar a un pueblo tradicional de Bali que se llama Penglipuran. Allí gente del pueblo nos invitó a visitar su casa, es muy curioso pero cada casa tiene su propio templo y en muchas ocasiones el templo es más grande que la propia casa. Seguimos la ruta hacia el volcán Batur que se encuentra en el pueblo Kintamani. Las vistas del lago Batur con el volcán de fondo son espectaculares. Después visitamos el templo manantial sagrado que se llama Gunung Kaki, un bonito templo con piscinas para los niños balineses. Despúes Mario nos llevó a comer a un restaurante balinés donde comimos Nasi goreng, plato de arroz típico balinés, sentados en el suelo con una vista sen
sacional a los balcones de arrozales de la montaña. Por la tarde llegamos a Ubud, situado en el centro de la isla. Ubud es la zona más tradicional de la isla, famosa por su artesanía. Allí visitamos el Cafe Lotus, la casa del rey que está en el centro de Ubud (donde se caso Alejandro Sanz), paseamos por el mercado y acabamos en una casa de un pintor balinés, dónde compramos unos cuadros para nuestra casita. Nos costó decidirnos por el tema del regateo, pero después de irnos regresamos a por nuestra compra, de la que estamos encantados porque que queda genial en la entrada…A última hora de la tarde regresamos a Nusa Dua y nos fuimos a cenar al primer italiano que hay nada más salir del complejo a la izquierda siguiendo las instrucciones de mi hermana, lo que se le olvidó decirnos era que el restaurante estaba dentro del complejo, en una zona de sólo restaurantes y tiendas. Nosotros salimos al pueblo y allí cenamos dónde pudimos ;-). Después fuimos a la playa y nos tumbamos en las hamacas del hotel, casi nos quedamos dormidos escuchando las olas…
Por la mañana temprano fuimos a la playa a dar un paseo y a las 8.30 a recepción dónde habíamos quedado con Mario para hacer lo que él llamaba ‘La excursión romántica de Bali’. Comenzamos pasando por el coche por las calles de Kuta, un lugar turístico, lleno de tiendas, de surferos y de australianos. Un porcentaje muy elevado de turistas de Bali son australianos y muchos pasan sus vacaciones en la zona de Kuta. Nos quedamos con ganas de pasear por sus calles así que al día siguiente decidimos regresar. Continuamos hacia el norte de la isla hasta llegar al Templo sobre el lago, un lugar con mucho encanto, con un templo en medio del lago al que sólo se puede llegar con unas pequeñas embarcaciones. El templo se llama Ulun Danu Batur. De allí continuamos más al norte hasta unas cascadas naturales, dónde estábamos sólo nosotros y un grupo de n
iños locales bañándose. Ni Igor ni yo nos animamos a bañarnos pero Mario se animó y se metió al agua mientras nosotros poníamos nuestros pies a remojo. Comimos en un lugar en lo alto de la montaña con vistas fantásticas sobre los dos lagos gemelos y ya de regreso paramos a ver los monos salvajes que había a ambos lados de la carretera. Recorrimos en coche el jardín Botanical Garden, sitio d
e recreo de los balineses, dónde van a pasar el día. Y paramos en el mercado de las frutas y orquídeas donde regateamos sin piedad para comprar un rolex y algún pareo. También compramos semillas de orquídeas que todavía no hemos plantado... no sé si nuestro clima será adecuado para que crezcan. Acabamos el día en el icon
o de Bali y lo que a nosotros sin duda nos gustó más: la puesta de sol en Tanah Lot. Situado al sur de la isla, es uno de los templos más importantes y bonitos de todo Bali, además de uno de los más antiguos. El escen
ario es precioso: un mar azul, los acantilados con playas pequeñas de arena blanca, y el templo dónde rompen las olas. La puesta de sol es de esas difíciles de olvidar. Acabamos tomando una cerveza en una de las terrazas hasta que el sol se ocultó completamente. Este día no podía acabar de otra forma que dándonos un homenaje y disfrutando de un masaje Balinés. Los masajes balines son en pareja, una misma instancia dan a los dos el masaje a la vez y luego un baño de rosas bajo la luz de las velas y un rato en el jacuzzi para concluir.Este día sí que cenamos en el primer italiano que hay nada más salir del complejo a la izquierda ;-).
140/6/2008 Nusa Dua - Kuta
Por fin, después de 22 días de viaje íbamos a dedicar el día a descansar, a disfrutar de la playa, de la piscina y del hotel.
Pasamos toda la mañana al sol, intercalando paseos por la playa, baños en el mar, en la piscina, sesión de yoga en el agua, lectura y descanso. Pero a las 2 ya estábamos cansados de descansar así que decidimos seguir indagando en la isla y regresamos a Kuta con la excusa de comer allí. Negociamos con un taxi y nos llevó hasta allí. Kuta es una mezcla entre lo balinés y lo internacional, ya que aquí se encuentran las tiendas de las mejores marcas de surf y también pequeños comercios locales de pinturas, collares y vestidos. Aprovechamos a pasear por sus calles y por su playa, dónde se respira un interesante ambiente surfero. Comimos en un restaurante local y ya por la tarde regresamos al hotel.
15-16/06/2008 Bali
Los dos últimos días cambiamos de hotel y fuimos a una villa en el hotel The Bale. La villa era impresionante, con piscina privada para los dos solitos, ducha balinesa, y demás lujos ¡un sitio para quedarse eternamente!. Sólo salimos la primera noche a un restaurante de Jimbarán a cenar una mariscada, buena, bonita y barata, tal y cómo ponía en la carta. La mariscada no sé si sería buena, pero desde luego el entorno inmejorable. Cenamos en la playa, con el agua del mar casi llegando a nuestros pies, y lo mejor, los mariachis cantando en span-english-bainés mesa por mesa.
17-18/06/2008 Bali - Bilbao
Y cómo todo lo bueno se acaba, llegó el día de volver a la realidad. Con ganas por ver a nuestra gente, pero con pena de que se acabara la luna de miel y un viaje fantástico altamente recomendable.
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